El cuidado de la piel toma una importancia estética que influye en las relaciones interpersonales, en la salud física y mental. Una piel elástica, firme, lozana y uniforme, es sinónimo de juventud por lo que requiere atención especial. Su cuidado debe iniciarse en forma temprana y preventiva.
Existen varios tratamientos médicos estéticos para mantener y mejorar el aspecto saludable de la piel, éstos deben adaptarse en función de las necesidades del paciente, el grado de envejecimento y ser personalizados. Actualmente se dispone de tecnologías avanzadas como la Luz Pulsada Intensa (IPL) que consiste en un dispositivo que emite una serie de ondas de luz, cuyos objetivos pueden ser la hemoglobina (contenida en células rojas de la sangre) o la melanina (pigmento marrón en pecas y manchas). El haz de luz pasa a través de la piel y es absorbido por la hemoglobina o la melanina, ello resulta en daño a la pared del vaso capilar o la fragmentación del pigmento (melanina). Estos pequeños vasos y el pigmento de melanina son reabsorbidos por el cuerpo, lo que hace que sean menos visibles.
La energía de la luz permite también mejorar paulatinamente la textura y tonalidad de la piel, eliminando poros dilatados, vello, telangiectacias, arañas vasculares (rojeces), manchas y las arrugas finas.
El resultado final es una piel bonita, turgente y de aspecto más joven. Sus beneficios son especialmente visibles al mes del tratamiento, momento en el que se valora el resultado de la primera sesión. Una vez realizado el tratamiento debe usarse protector solar y evitar la exposición directa a la luz solar.
Éste y otros tratamientos médicos estéticos deben ser realizados por un profesional médico experto y acreditado en el área.
Dra. Tania Arancibia Baspineiro
Medicina Estética, Antiage y Ozonoterapia
Cel. 72536003